San Juan y San Pablo.

ERMITA DE LOS SANTOS JUAN Y PABLO - TELLA.

Siguiendo la orilla derecha del Cinca desde Ainsa hacia Bielsa, poco antes de que en él desagüe el Cinqueta, una culebreante pista asfaltada nos remonta hasta el collado de Las Cazcarras a 1.342 m de altitud; donde se emplaza la pintoresca localidad de Tella.

Poco antes de llegar al pueblo a cincuenta metros a la izquierda de la carretera, convenientemente señalizado se halla el emblemático dolmen de Tella atestiguando la población de la zona en época neo-eneolítica.

Rodeando el collado donde se asienta el pueblo de Tella, al otro lado del mismo, canónicamente orientada y al resguardo de la mole rocosa a la que llaman "El Puntón de las Brujas" asienta la más antigua de las ermitas documentadas del Sobrabe.

La ermita dedicada a los Santos Juan y Pablo ("San Juanipablo" le dicen aquí) fue consagrada el año 1019, según quedó constancia en su lipsanoteca fabricada en madera de pino conteniendo en su interior inscripción el pergamino (2,5 x 14,5 cm) acreditando su consagración llevada a cabo por el Obispo Borrell de Roda de Isábena.

El lugar de su ubicación no puede ser más espectacular. La esotérica denominación de la roca a poniente de la ermita, nos evoca escenas de aquelarre que a buen seguro debieron ser "esconjuradas" por la construcción del lugar sagrado.

Muy probablemente a sabiendas de que la prohibición del rito pagano por parte de la Iglesia no sería escuchada, la opción fue reconvertirlo ("sincretizarlo") en procesional marcha al templo que allí erigió. Sabia actitud de esa Institución que no en balde lleva veinte siglos sorteando circunstancias adversas.

 

Los textos aquí expuestos han sido extraidos de la web de Antonio García Omedes - Huesca (España)

http://www.romanicoaragones.com/